En esta ocasión necesitaremos una plantilla, que bien podemos comprar o hacernos la nuestra personalizada en un trozo de plástico fino tipo portada de algunos cuadernos.
Estiraremos la camiseta y colocaremos la plantilla donde deseemos que pegaremos con un poco de spray adhesivo para asegurarlo. En el interior de la camiseta colocaremos un trozo de cartón para que no sobrepase el blanqueador a la parte de la espalda.
En una botella con spray, vierte el blanqueador, y comienza a rociar sobre la camiseta. Esperar 2 minutos y volver a repetir la operación. Cuando este seco levantamos la plantilla y retiramos el cartón de su interior.
Podemos lavar la camiseta como hacemos normalmente.
Siguiendo No Solo DIY.